La pequeña estatua-Jorge Humberto


Muñeca de porcelana lanza su sombra
en el intervalo de las paredes
y su figura se agiganta mientras más
le da la claridad del sol.

Allí parada, asume posición hierática
ante todos los detalles de los otros objetos,
dispuestos por la galería
de la casa maravillosa.

Abajures se asemejan la pasados
que ya no vuelven
y cubren los
libros en su ténue luz, casi romántica,
casi impar en su discurrir.

Las ventanas están semi cerradas hacia la calle
y viene hasta nosotros la dulce fragancia de los
Nardos y Sándalos
que abundan en las traseras
de la desconocida casa.

Escribo este poema a media luz,
aquella pequeña estatua que la sombra
nivela por debajo hasta alcanzar otro nivel,
subiendo por las escaleras.

Y en la antigua galería máscaras groseras
y provocadoras tienen clavos en la pared,
mientras todos duermen
en la casa que pocos visitaron hasta ahora.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Caro amigo Jorge Humberto; te felicito por el poema maravilloso, gusté mucho! Mi abrazo fraterno. Antonieta Elias Manzieri.

Anónimo dijo...

muy hermoso
ana maria de argentina

Paulo Tamiazo dijo...

Grande Jorge! Parabéns pela publicação...